Después de meses o, incluso, años de no dormir bien y estar cansado e irritable por las mañanas, ha recibido el diagnóstico de apnea del sueño, un trastorno del sueño posiblemente grave en el que una persona deja de respirar y comienza a hacerlo nuevamente de manera repetida mientras duerme. ¿Y ahora qué? La buena noticia es que la apnea del sueño se puede tratar y, con la ayuda de un dispositivo CPAP y algunos cambios en el estilo de vida, podrá disfrutar de una noche completa de sueño en un instante. Más de 22 millones de estadounidenses tienen apnea del sueño. “Menos del 10 por ciento tiene diagnóstico y recibe tratamiento. Los ronquidos y el sobrepeso son dos indicadores muy fuertes de la posibilidad de tener apnea obstructiva del sueño (AOS)”, advirtió el Dr. Johnathan Greenburg, un experto en ronquidos y apnea del sueño. La forma más precisa para diagnosticar la apnea del sueño es a través de un estudio de sueño o polisomnografía, ya sea en un laboratorio o en el hogar, de acuerdo con WebMD. Si se le diagnosticó apnea del sueño, el médico le recomendará un programa de tratamiento que probablemente incluya el uso de un dispositivo CPAP (presión positiva continua en las vías aéreas), el cual tiene una máscara que se usa sobre la nariz o en la nariz y la boca para forzar un flujo de aire continuo durante el sueño. Los dispositivos CPAP impiden que los pacientes se despierten varias veces durante la noche, y permiten que alcancen ciclos de sueño más profundos, para estar más descansados durante el día. “Los pacientes deben saber que no todos los tratamientos funcionan para todos los pacientes y que el tratamiento para la apnea obstructiva del sueño es multifactorial tal como la propia afección. Asimismo, más de un tratamiento puede ser necesario sinérgicamente con el fin de obtener resultados terapéuticos documentados”, expresó la Dra. Claudia Camelia Cotca, DDS, MPH, en el Washington Institute for Dentistry & Laser Surgery. Sin embargo, cuando se usa por la noche, el tratamiento de la AOS con un dispositivo CPAP ofrece beneficios que van más allá de una buena noche de sueño, entre los que se incluyen la disminución del riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, presión arterial más baja, más energía y atención durante el día, y una mejor calidad de vida general. Aunque el CPAP es el método más eficaz para reducir o, incluso, eliminar los síntomas de apnea del sueño y, además es la elección de preferencia, se pueden usar otros tratamientos junto con un dispositivo CPAP o en lugar de este. Cotca trabaja codo a codo con médicos especialistas en el sueño a fin de identificar aparatos dentales que ubiquen la mandíbula en una posición que permita aumentar el oxígeno y ayudar con el caudal de aire. Otros tratamientos para la apnea del sueño que se pueden usar junto con el CPAP o los aparatos dentales incluyen la cirugía del paladar blando o la úvula (tejido muscular pequeño y cónico que cae desde el centro del paladar blando), los medicamentos y los cambios en el estilo de vida, entre los que se incluyen la pérdida de peso y dejar de fumar, según los National Institutes of Health. Otras medidas positivas después de un diagnóstico de apnea del sueño son: