Parece un avión, se comporta como una nave espacial, te hace sentir la mayor oleada de euforia que jamás has experimentado, pero va mucho más rápido y es muchísimo más potente. Descubre la increíble innovación que está haciendo de los viajes espaciales un fenómeno cotidiano: la nave espacial XCOR Lynx Mark II.
En un futuro cercano, podrás despegar de Curaçao o el desierto de Mojave en este asombroso vehículo. Se trata de un ingenioso híbrido entre cohete espacial y avión a propulsión diseñado para darte un espectacular paseo por el espacio antes de regresar sano y salvo a la Tierra. Imagínate ganar un viaje al espacio en el puesto del copiloto…
Después de dejar la pista de despegue en horizontal, el piloto orientará el morro de la Lynx de manera pronunciada hacia arriba. Su potente ascenso alcanzará una velocidad de Mach 2,9 en 3 minutos. Los motores se apagarán a 58,5 km (192 000 pies) y continuarás casi en vertical hasta llegar al punto de ingravidez a una altitud de 103 km (338 000 pies).
Sin darte cuenta, habrás cruzado la línea de Kármán: la separación oficial invisible a 61 km de la Tierra que marca la salida de la atmósfera terrestre. Enhorabuena: estás en el espacio exterior y ya eres astronauta. Flota durante otros seis minutos mientras te quedas boquiabierto contemplando el planeta Tierra. A continuación, llega el momento de la reentrada, con una aceleración de hasta 4 G durante la retirada. Para volver a la Tierra, planearás y te desplazarás en círculos hasta efectuar un suave aterrizaje horizontal. Tu planeta de origen nunca volverá a parecerte el mismo.
Philips ofrece vuelos espaciales en esta singular nave gracias a su colaboración con XCOR Space Expeditions. Juntos, celebraremos el poder de la innovación para transformar la vida de la gente.
(Infografía de la película de ambiente y vuelo espacial de XCOR)